Chocó borracho este viernes y tenía el antecedente de haber atropellado y matado también borracho, pero en 2010
Catorce años después de haber provocado un trágico accidente que terminó con la vida de Tomás Trossero a los 19 años, Pablo Emiliano Yáñez, de 37 años, se vio involucrado en otro violento choque, pero esta vez sin cobrarse la vida de ninguna persona. En ambos incidentes, un factor común prevaleció: conducía bajo los efectos del alcohol.
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El incidente ocurrió este viernes en la nueva rotonda de la calle Aráoz, cerca del Acceso Sur y frente al INTA, en Luján de Cuyo, alrededor de las 5:05 de la mañana. La policía de Mendoza llegó al lugar y encontró una serie de infracciones: el test de alcoholemia arrojó que el conductor tenía 2,7 gramos de alcohol en sangre.
Pablo Yáñez fue condenado en 2012, por atropellar y matar a Tomás Trossero.
Además, se descubrió que su licencia de conducir estaba vencida desde 2023. Afortunadamente, esta vez la imprudencia no terminó en tragedia, ya que no hubo otros vehículos involucrados y no se reportaron heridos.
Pablo Emiliano Yáñez conducía un Peugeot 208 gris cuando perdió el control del vehículo y chocó con la rotonda. Según fuentes del Ministerio de Seguridad, "el sujeto se quedó dormido". Este incidente es especialmente preocupante, ya que Yáñez tenía antecedentes penales por un hecho similar ocurrido en 2010, cuando atropelló y mató a Tomás Trossero. En esa ocasión, también conducía bajo los efectos del alcohol y con la licencia vencida.
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Yáñez fue condenado en 2012 a 8 años y 6 meses de prisión por "homicidio simple con dolo eventual", además de recibir 10 años de inhabilitación para conducir. Sin embargo, gracias a una reducción de pena, recuperó su libertad en 2014 después de cumplir solo 3 años.
Ahora, casi catorce años después del trágico incidente que terminó con la vida de Trossero, Yáñez vuelve a estar involucrado en un accidente mientras conducía bajo los efectos del alcohol. Por suerte, esta vez no hubo víctimas mortales.
