Las fuertes hipótesis que se manejan sobre la muerte de la "Tota" Santillán
El fallecimiento de Ricardo Daniel Carías, conocido popularmente como La Tota Santillán, generó un profundo impacto en la opinión pública y abrió una serie de interrogantes que la Justicia deberá responder para esclarecer las circunstancias exactas de su muerte.
Los escabrosos detalles que reveló la autopsia de la "Tota" Santillán
El reconocido conductor de programas de cumbia, de 57 años, fue hallado sin vida en su vivienda ubicada en Castelar, en el partido de Morón, provincia de Buenos Aires. Hasta el momento, las hipótesis sobre su muerte se centran en dos líneas de investigación: el suicidio y la posibilidad de un accidente doméstico.
El cuerpo de Santillán fue descubierto luego de que sus familiares decidieran acercarse a su hogar tras varios días sin recibir respuesta a sus llamados. El parte policial detalla que efectivos de la Comisaría N°7 de Morón acudieron al lugar luego de un llamado de emergencia al 911. Al llegar, los oficiales tuvieron que forzar la puerta para entrar a la casa, donde se encontraron con el cuerpo calcinado del conductor.
A su alrededor, los agentes hallaron una botella de líquido inflamable y fósforos, lo que llevó a los peritos a pensar que Santillán pudo haberse rociado con esa sustancia para luego iniciar un fuego que provocó su muerte. Además, el incendio generó un corte de luz en la vivienda, lo que complicó aún más el escenario dentro de la casa.
Uno de los factores que refuerza la hipótesis del suicidio es el contexto emocional que atravesaba La Tota Santillán. Fuentes cercanas al artista señalaron que desde hacía tiempo estaba sumido en un cuadro de depresión, derivado de problemas económicos y la condena que había recibido en una causa por violencia de género.
Según el parte policial, no era la primera vez que el conductor había intentado quitarse la vida.
En el pasado, Santillán había tratado de suicidarse cortándose las venas, lo que refuerza la teoría de que su muerte pudo haber sido provocada por él mismo, en un momento de desesperación.