Se murió el piloto argentino que combatió contra Hitler: tenía 107 años
Ronald David "Ronnie" Scott, el último piloto latinoamericano sobreviviente de los cazas Spitfire y uno de los 5.000 argentinos que se ofrecieron como voluntarios para luchar contra el nazismo durante la Segunda Guerra Mundial, falleció el jueves a los 107 años.
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Nacido en Villa Devoto el 17 de octubre de 1917, Scott fue hijo de una enfermera inglesa y de un excombatiente escocés que luchó en la guerra de los Boers. Su vida estuvo marcada por una profunda vocación de servicio y un fuerte sentido del deber, que lo llevó a alistarse en la Royal Navy británica a los 24 años. "Creo que todos deberían haber ido a parar a Hitler. Fue un malnacido que provocó un horror", dijo alguna vez en una entrevista con Clarín.
El aviador argentino mantuvo una lucidez y vitalidad envidiables incluso en sus últimos años: jugaba a las bochas, montaba en bicicleta y compartía anécdotas de su vida. "Yo soy argentino, tenemos uno de los mejores países del mundo. Lo lamentable es que se perdió el nivel que teníamos en los años 40", reflexionaba con frecuencia.
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Tras el fin de la guerra, vivió en Inglaterra por cuatro años, donde se formó en la industria textil antes de regresar al país. Se estableció en San Isidro y continuó volando, esta vez como piloto comercial. Acumuló más de 23.000 horas de vuelo en Aeroposta Argentina y Aerolíneas Argentinas, y fundó la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA).
Scott también se destacó en el deporte: fue jugador de rugby, cricket y bowls en el Club Atlético San Isidro (CASI), que lo despidió con un mensaje emotivo: "Una vida de película para un gran personaje del club, siempre alegre, muy respetuoso y con muchos amigos".
Casado con Marian, fue padre de Roger y David, abuelo y bisabuelo. Su legado como uno de los héroes argentinos que enfrentaron al régimen de Hitler fue reconocido tanto en el país como en el Reino Unido.
La embajadora británica en Argentina, Kirsty Hayes, expresó en redes sociales: "La partida de Ronny Scott es una noticia que nos entristece a argentinos y británicos. Nacido en Villa Devoto, vivió 107 años en los que mantuvo siempre su compromiso con la comunidad. Y en la Segunda Guerra Mundial demostró su valentía como piloto de la Royal Navy".
Sus últimos días los vivió en el hogar de la Asociación de Beneficencia Británica y Norteamericana, en el mismo barrio donde nació, dejando un legado que une historia, aviación y coraje.
