Reapareció Martín Guzmán y fulminó a Máximo Kirchner
En las últimas horas reapareció el ex ministro de Economía Martín Guzmán, y dijo que con Cristina Kirchner "gestionar era una hazaña", describiendo así a las trabas que la vicepresidenta le puso durante su paso por el Palacio de Hacienda.
Además, se la agarró con el diputado Máximo Kirchner, al que tildó de "chico caprichoso". Esto no es todo. Dijo también que su actitud "le sale cara al país".
"Hay un balde de mierda y otro balde de mierda, y el ministro tiene que meter la mano en uno de los baldes de mierda y eso es lo que hay. Le debíamos 45.000 millones de dólares al FMI. ¿Cuáles eran las alternativas? O llegar a un acuerdo para refinanciar, o hacer el default", graficó.
La curiosa frase macrista que utilizó Máximo Kirchner en un acto de La Cámpora
Recordó que Máximo "pedía un acuerdo a 40 años con el FMI, es algo que no es posible. Ahora la vicepresidenta, que es su madre, le da poder a alguien que no puede ejercerlo de forma responsable".
En otro pasaje de su entrevista emitida por NeuraMedia, el ex ministro enumeró los distintos puntos decisivos que marcaron su gestión en el Palacio de Hacienda, con fuertes críticas al kirchnerismo, al que acusó de no haberle dejado gobernar.
"Donde hay un punto de quiebre en la dinámica de la gestión es unos días antes del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), se cortaron todas las líneas de comunicación con Cristina Kirchner", dijo.
Guzmán explicó que "conducir la política económica se había convertido en algo extremadamente difícil".
Expresó que si el FMI hubiese propuesto condiciones similares a las que le ofreció el gobierno de Macri, "hubiese preferido el default".
En cuanto a su renuncia, Guzmán dijo: "Yo di un ultimátum: esto hay que hacerlo esta noche".
"Cuando conducís una negociación internacional no solamente importa lo que construís en el diálogo de la política exterior, sino también importa la dinámica política interna. Si los bonistas ven que el propio sistema político no da señales de que si es necesario vas a hacer un default, la tenés mucho más complicada", indicó.
Y admitió que "en un momento crítico hubo un rol constructivo que ayudó a la Argentina. Cuando Cristina juega a favor tiene un enorme potencial, cuando juega en contra también tiene mucha potencia".
Subrayó que el rol de la vicepresidenta "fue muy diferente el rol en la negociación con los privados, que en la negociación con el FMI".
"Cristina en la negociación con los acreedores privados fue de una ayuda muy importante y decisiva. Y en un momento tuvo un rol para ordenar lo que se daba a nivel político, y eso me ayudó mucho a poder llegar a un acuerdo y que nos dejaran de mover los bonistas", destacó.
En esta línea, explicó que "en la negociación con el FMI fue diferente. Donde hay un punto de quiebre en la dinámica de la gestión es unos días antes del acuerdo con FMI. Cuatro días antes del acuerdo se cortan todas las líneas de comunicación conmigo. No me atendía, o el secretario tampoco me atendía, la gente de su entorno con la que venía hablando. Entonces mandaba la información directamente por mensaje a alguien clave de su entorno".
¿CFK 2023? El curioso video que hace pensar en una posible candidatura presidencial
"Nunca más hablé desde ese momento. Faltaban cuatro días para acuerdo o default. En ese momento Alberto gobernó, él sí condujo. En ese momento Cristina se corrió y eso tuvo implicancias para toda la gestión que vino a posteriori", agregó.
Guzmán, que se alejó del Gobierno en malos términos, dijo que "después de ahí, gestionar era una hazaña: "Es difícil aceptar posicionamientos especulativos cuando se contraponen a lo que la patria necesita".
"Si el FMI nos hubiese puesto en un lugar como era el del gobierno anterior, la verdad es que hubiese preferido el no acuerdo. El default era ajuste. En el Congreso, La Cámpora votó un ajuste. Entre el default y el acuerdo, un acuerdo que si lo hubiese conducido Cristina Kirchner hubiese llenado la Plaza de Mayo con pancartas diciendo: ´Le torcimos el brazo al FMI´. Un acuerdo que no tiene precedentes en la historia", enfatizó.
También hizo mención a la renuncia de Máximo Kirchner en el Congreso:"Me enteré de que una parte de nuestro propio frente votaba en contra del acuerdo del FMI cuando eso ocurrió".
Consideró que ese hecho "afectó a la Argentina, no a mí. Impacta en las expectativas, en la estabilidad política, en la capacidad de gestionar. Estuvimos un semestre gestionando un programa que la líder del frente no apoyó".
"Cuando se da esta situación entre nuestro frente y votar en contra del acuerdo con el FMI, toda la gestión queda afectada. Le daba instrucciones a funcionarios que dependían de mi propia área y me decían: ´Bueno´ y no lo hacían. Pasó principalmente en la política energética", admitió Guzmán.
Y aclaró que no se retiró de la política. De hecho, aseguró que sigue "pensando y trabajando para poder construir una Argentina más fuerte, con más oportunidades, más equitativa, una Argentina que progrese".