Pettovello, complicada: la Justicia encontró diferencias en la cantidad de comida de Capital Humano
Una inspección ordenada por el juez Sebastián Casanello en el depósito de Villa Martelli destapó significativas discrepancias entre los alimentos registrados por el Ministerio de Capital Humano y los realmente almacenados por el Gobierno nacional.
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La revisión, impulsada también por la fiscal Paloma Ochoa, se realizó en medio del escándalo que provocó renuncias en la cartera social liderada por Sandra Pettovello.
El relevamiento judicial reveló diferencias notables tanto en la cantidad como en el tipo de alimentos. En particular, de las 30,240 unidades de leche en polvo reportadas, solo se encontraron 18,640, es decir, faltaban 11,600 unidades. Curiosamente, en otro lote de 229,034 unidades, sobraban las mismas 11,600 unidades faltantes en el primer lote. Este patrón de inconsistencias se repitió con otros productos, como los aceites y el puré de tomate.
Además, se identificó la ausencia de documentos que expliquen el destino de los alimentos vencidos. No se encontraron evidencias de los aceites marca Costa del Sol, aunque sí se hallaron 25,350 unidades de aceites Alsamar no registradas. Este descontrol administrativo generó una brecha considerable entre los registros oficiales y la realidad del inventario.
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El informe oficial del Ministerio de Capital Humano había indicado que los depósitos de Villa Martelli y Tafí del Valle, en Tucumán, albergaban un total de 5,902,987 kilos de comida. De estos, 3,627,815 kilos estaban en Villa Martelli y 2,275,172 kilos en Tucumán. Entre los alimentos se encontraban aceite de girasol y soja, arroz con carne, arvejas, garbanzos, harina de maíz, leche en polvo, lentejas, locro, pasas de uva, pasta de maní, puré de tomate y yerba mate.
Sin embargo, el relevamiento judicial encontró que 3,792 kilos de yerba mate, que debían haberse distribuido antes del 31 de enero de 2022, todavía estaban almacenados, vencidos bajo la gestión de Alberto Fernández. Además, había 40 kilos de arroz vencidos desde el 28 de febrero de 2024 y 339,867 kilos de leche en polvo con fechas de caducidad en julio de 2024. También, 4,439 kilos de harina de maíz vencerían a finales del mismo mes.
El escándalo se profundizó cuando desde el Gobierno inicialmente aseguraron que no había alimentos vencidos. Esta contradicción llevó a la renuncia de Pablo de la Torre, secretario de Niñez, Adolescencia y Familia del ministerio dirigido por Pettovello, junto con otros funcionarios de su área. Las investigaciones ahora buscan aclarar el destino de los alimentos faltantes y las responsabilidades detrás de estas irregularidades.