Milei se lavó las manos por la polémica con Arrieta y le tiró la pelota a Villarruel: "Habría que..."

El Presidente se desligó de la controversial visita de los diputados libertarios a genocidas y le tiró un palito a su vice.

El presidente Javier Milei expresó su condena a la reunión entre diputados de La Libertad Avanza (LLA) y represores detenidos en la cárcel de Ezeiza. La legisladora mendocina Lourdes Arrieta estuvo presente en la visita, que incluyó al exmilitar Alfredo Astiz, condenado por crímenes de lesa humanidad.

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En una entrevista radial, Milei dejó claro su descontento con el encuentro, afirmando que "esa no es mi agenda" y sugirió que la visita fue organizada con intenciones cuestionables. "Habrá que investigar cómo fue movido eso. Fue hecho con intenciones, el cura que organizó eso terminó siendo echado", señaló el mandatario, enfatizando que este tipo de acciones no representan su visión política.

  Cuando se le preguntó sobre la posible implicancia de la vicepresidenta Victoria Villarruel en la organización del evento, Milei respondió con cautela: "No sé si tuvo algo que ver con esto. Habrá que ver. Mi agenda no es seguro", dejando en el aire la posibilidad de su participación.  

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  La entrevista también dejó en evidencia diferencias internas dentro del partido, particularmente en torno a la figura del juez Ariel Lijo, propuesto como candidato para integrar la Corte Suprema.   

Mientras que Villarruel desaprueba la elección de Lijo, Milei manifestó su apoyo, subrayando que "ella tiene su opinión y yo tengo otra", y agregó que la discrepancia es parte natural del proceso político, reafirmando su rechazo a rodearse de "un coro de focas obsecuentes".

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