Le hizo juicio a un "Telo" por la razón más simple y ganó miles de dólares
Durante años, Jorge Ruiz sufrió en su propia casa los constantes ruidos provenientes de un hotel alojamiento vecino en el barrio Mondongo de La Plata. La situación era tan grave que los niños pequeños y nietos de sus amigos no podían visitarlo, y quienes lo hacían terminaban entendiendo su desesperación.
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A pesar de las sugerencias de mudarse a un lugar más tranquilo, Jorge se negó a abandonar su hogar. "No quería resignarme, tenía derecho a vivir cómodo", aseguró. Finalmente, después de una intensa batalla legal, logró una compensación de aproximadamente 24.000 dólares.
En el juicio se presentaron testimonios de varias personas cercanas a Jorge, incluyendo a una mujer con la que salía. Los ruidos de las habitaciones del hotel eran tan perturbadores que una niña creyó escuchar gritos de una mujer siendo agredida. "No era posible vivir con ese ruido", relató Jorge.
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El caso, que duró dos años, se resolvió en 2018 gracias a la prueba del decibelímetro que demostró que los ruidos superaban los niveles permitidos. Además de los daños físicos, como problemas gástricos y estrés, Jorge también sufrió daños psicológicos, evidenciados en el juicio.
Con la reducción de la actividad en la habitación contigua, Jorge finalmente comenzó a recuperar la paz en su hogar. Aunque la convivencia con el hotel sigue siendo mínima, asegura que ahora puede disfrutar de una tranquilidad que antes le resultaba inalcanzable.