La conducta que adoptaron los precios tras la derogación de la Ley de Alquileres
La reciente derogación de la Ley de Alquileres generó un cambio significativo en el mercado de alquileres en Argentina, con propietarios e inquilinos ajustando sus prácticas y estrategias en el último mes.
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La entrada en vigencia del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/2023 el pasado 29 de diciembre suprimió la Ley de Alquileres que regulaba los contratos de locación, dejándola en vigor únicamente para los contratos previamente firmados.
En este período, se observó una marcada tendencia hacia la negociación de contratos de corto plazo entre propietarios e inquilinos.
Los contratos de alquiler que se pactaron de común acuerdo en los últimos treinta días, mayoritariamente fueron con duraciones de uno a dos años. Sin embargo, la novedad radica en que la actualización de precios se vinculó estrechamente a la inflación, con ajustes trimestrales o, en algunos casos, cada seis meses.
La derogación de la ley impactó significativamente en las condiciones de los contratos, según revela la Encuesta Nacional Inquilina realizada en enero. El 87,3% de los contratos firmados posteriormente a la entrada en vigencia del DNU tienen ajustes en períodos inferiores a seis meses, siendo el 25% cada tres meses.
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Este cambio contrasta con el escenario previo al DNU, donde el 69% de los contratos contemplaba actualización anual y solo el 4% cada tres meses.
