Apareció Duhalde y dejó una particular metáfora sobre la política argentina y las Pelopincho
Este miércoles el expresidente Eduardo Duhalde evaluó la situación económica, política y social que atraviesa la Argentina y si bien advirtió que la situación requiere "dejar de echar leña al fuego" pero luego afirmó que "Lo que está pasando es un desastre" y que "Argentina está muy mal, cada vez peor".
El ex jefe de Estado habló también sobre el estilo de gestión del Alberto Fernández y al respecto consideró que gobernar configura un acto "sencillo" y que el problema del país no está en la deuda contraída con el FMI sino lo que "no se produce".
En ese sentido dejó una particular metáfora sobre la política argentina: "A un amigo querido, siempre le digo que estamos haciendo un maremoto en una pelopincho".
"No todos los dirigentes son malos, hay muchos malos, regulares y buenos. Sólo hay que juntarlos", señaló Duhalde, a la vez que agregó: "La dirigencia se acostumbró a ganar un millón de pesos por mes".
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Al analizar la función del Presidente, volvió a advertir sobre el impacto de ese rol en la salud mental de quien lo ejerce: "No es sano. En el último mes de la gestión de (Fernando) De la Rúa estaba su cuerpo, pero no él. Su mente estaba en otro lado, no escuchaba, tenía la mirada perdida".
Para el exmandatario, esta pérdida de la ubicación se genera en las personas que consideran que pueden abarcarlo todo. Y volvió a contar que padeció una situación similar durante su mandato: "En marzo empecé a alucinar, veía un río en Olivos. Me trajeron a ocho adventistas y así salí. La gente no se enteró".