El emotivo testimonio del joven que encontró los dos cuerpos en el cerro El Plata: "Sentí que me miraban"
La semana pasada, la Patrulla de Rescate de la Policía logró bajar los cuerpos de dos andinistas desde el cerro El Plata que se encontraban desaparecidos desde 1996, y cuyos cadáveres en buen estado de conservación habían sido encontrados días atrás por el guía de montaña, Juan Cruz Rodriguez.
Los cuerpos de los andinistas Nicolás Ibaceta y Roberto Leroy Villa fueron reconocidos por sus familiares.
Luego, Juan Cruz contó en su cuenta de Facebook cómo dio con los cuerpos de los andinistas estando solo en el cerro El Plata. Nombró la ruta que hizo como la "variante Leroy-Nico".
El joven estaba solo en la montaña. Pasó la noche y fue rumbo a la cumbre en medio de mucho frío, a más de cinco mil metros.
"De pronto vi una varilla de una carpa, me resultó extraño pero seguí caminando para arriba, dos zig-zag más y a la izquierda una tela rosada, ahí si me empecé a cuestionar algunas cosas, pasaron unos segundos, dos pasos más y cuando miro al filo donde iba a salir vi un bulto grande de colores y parecía que alguien me estaba mirando", contó.
"Acá si me quedé sin aire y me empezó a dar muchísimo miedo, en este momento cambio todo mi pegue, ya me imaginaba toda la situación, cuando me acerco eran dos personas acostadas una al lado de la otra, cómo si hubieran intentado pasar la noche, realmente sentía que me estaban observando, y que sabían que yo estaba ahí, eran alma y cuerpo juntas, de verdad sentía que uno se iba a levantar, tuve mucho miedo y a la vez tristeza por el desamparo de esos chicos intentando pasar el pesto con algo de esperanza", agregó sobre el momento en que dio con los dos cuerpos
"Estuve un minuto pensando que alucinaba y el resto fue caer en la cuenta de que todo era real, decidí no quedarme más tiempo y salir lo antes posible a la cumbre para poder bajar a Vallecitos y regresar a casa", dijo.
La historia de los andinistas desaparecidos hace 25 años y reconocidos en 90 minutos
Luego, Juan Cruz hizo dedo para volver a la Ciudad. Lo trajo una pareja de andinistas a los que le contó lo que había pasado, aún sin caer del todo. El hombre que manejaba le contó, sin dudas, que esos cuerpos eran los de Nicolás Ibaceta y Roberto Leroy. "No tengas miedo, lo que te acaba de ocurrir es un regalo de los apus del monte, vas a dejar a mucha gente tranquila y en paz", le dijeron al joven guía.
"Abrazos enormes para toda la gente que los conoció y compartió un rato con Nico y Leroy, sepan que lo estaban dando todo y estaban buscando un lugar para intentar pasar la noche o el día de pesto, la montaña decidió quedárselos un largo tiempo, hoy, fue momento de soltarlos para poder darle una oportunidad a la familia de despedirlos y verlos una última vez, deseo paz para todas las personas que tanto los extrañaron y tanto los buscaron, y para la familia, que puedan cerrar este ciclo de espera en paz. Nico y Leroy, grandes Titanes del monte", cerró su posteó Juan Cruz.