La insólita súplica de un joven borracho que entró a robar y quedó atorado en una reja

Un ladrón intentó robar en una casa de la ciudad misionera de Posadas, pero sufrió un percance en momentos que intentaba abandonar la propiedad. Al saltar la reja para escapar, una de sus prendas de vestir se enganchó y quedó atascado.

Esta situación no pasó desapercibida para los vecinos, que filmaron al ladrón hasta que llegó la policía y lo detuvieron.

Entró a robar a un supermercado, se escondió en una heladera y lo detuvieron

De acuerdo a periodistas locales, todo sucedió en la madrugada del viernes pasado, cerca de las 5, en el interior del barrio 27 de Agosto de la ciudad de Azara. En ese entonces, el ladrón, que es menor de edad, entró a robar a una casa ubicada en la esquina de las calles Ucrania y Urquiza.

El robo no tuvo un final feliz para él, ya que el dueño lo descubrió. Cuando el malviviente quiso huir por arriba del portón del frente de la vivienda, su pantalón se enganchó en la reja y el joven de 17 años quedó suspendido de los tobillos, y con la cabeza hacia abajo.

Un vecino captó con su teléfono la situación y conversó con el malviviente. Las imágenes rápidamente se viralizaron.

"Ahora aguantate hasta que venga la Policía", le manifestó el vecino al ladrón, mientras que este suplicaba para que lo dejaran ir.

"Mi papá me va a pegar", repetía en varias oportunidades el adolescente, mientras el vecino le decía que le dijera su nombre y su apellido. El hombre informó de lo ocurrido al 911 y una comitiva policial de la Unidad Regional VII llegó al lugar. Una vez en la vivienda en cuestión, los ladrones se entrevistaron con el dueño de la casa, que explicó que, mientras descansaba, escuchó que sus perros ladraban alterados. Al salir al jardín observó al ladrón que se había metido en el interior de la propiedad. Ahí fue cuando el joven intentó escalar el portón y quedó colgado.

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El delincuente fue identificado como S.R.M.R, de 17 años, y domiciliado en ese mismo barrio, según publicó el sitio Misiones Online. Al momento de ser detenido estaba desorientado y, según sospechan los pesquisas, bajo los efectos del alcohol.

El joven fue demorado y enviado a la seccional local y luego, tras la de la Justicia de Menores, fue llevado a su casa y entregado a sus padres.

A las horas del hecho, un grupo de policías encontró sobre la calle Ucrania, a la altura del Barrio María Auxiliadora, un Chevrolet Agile abandonado que pertenece, justamente, al padre del adolescente y que tenía en el habitáculo varias botellas de bebidas alcohólicas. El hombre explicó en la comisaría que a su auto lo estaba utilizando su hijo, por lo que el rodado fue secuestrado.