La insólita razón por la que las playas de Camboriú se quedaron sin sol
La ciudad de Camboriú es una de las más importantes del sur de Brasil. Con los años se transformó en una referencia para brasileños y turistas a la hora de veranear en la zona sur del enorme país sudamericano.
Sin embargo, en los últimos años ha empezado a tener un gran problema. A pesar de tener poco más de 145 mil habitantes, y ser muchísimo más pequeña que grandísimas urbes como San Pablo o Río de Janeiro, que cuentan por millones sus habitantes, en Camboriú están seis de los diez edificios más altos de América del Sur. Una locura.
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Para peor, la mayoría de estos rascacielos se encuentran en la costanera de la Praia Central, la playa más popular de la ciudad. Eso ha hecho que el sol pegue muy poco en las arenas de la ciudad porque entre todos los edificios hacen sombra a hora muy temprana del día.
Sabrina Silva, quien vive en Camboriú, contó a la BBC que después de las dos de la tarde las playas se quedan casi sin sol y que las personas se amontonan en los sectores donde se filtran algunos rayos.
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La proyección de la sombra de los rascacielos sobre las playas hacen que estos hermosos lugares para veranear sean más fríos y oscuros, algo que claramente va en contra del disfrute de los turistas.
Así se ven las playas por los edificios.
Según el departamento del turismo de la Ciudad, en el 2019 recibieron la visita de un millón de personas para convertirse en uno de los lugares más visitados en Brasil por los turistas.
