El Papa tomó una decisión histórica que festejan las mujeres
La Iglesia de a poco trata de avanzar frente al atraso histórico que tiene sobre tantos temas, entre ellos el mínimo papel que le ha dado a las mujeres. Este lunes, en una decisión histórica, el papa Francisco decretó que las mujeres pueden acceder a los ministerios del "lectorado" y el "acolitado", hasta ahora reservados a los hombres en el derecho canónico. Esto supone un giro histórico a la doctrina de la Iglesia al eliminar la restricción de género.
Con un Motu Propio publicado este lunes, el pontífice modificó uno de los artículos del Código de Derecho Canónico y le dio un marco legal a una práctica que era utilizada en algunos lugares, pero sin el aval jurídico de la Santa Sede.
El creador de Telegram reveló la razón de por qué su aplicación crece y Whatsapp se derrumba
"Me pareció oportuno establecer que pueden ser instituidas como Lectores o Acólitos no sólo hombres sino también mujeres, en quienes, a través del discernimiento de la pastores y después de una adecuada preparación, la Iglesia reconoce 'la firme voluntad de servir fielmente a Dios y al pueblo cristiano'", sostuvo Francisco en las consideraciones del decreto de este lunes.
Según la tradición de la Iglesia, el lector es el encargado de leer la Palabra de Dios en la asamblea litúrgica, instruyendo a los fieles para recibir los sacramentos, mientras que el acólito oficia de ayudante del diácono y al sacerdote en el altar.
En ocasiones, el acólito puede distribuir la comunión y expone el Santísimo para la oración, uno de los momentos de las misas católicas, además de instruir a todos los fieles sobre la Eucaristía.
Avión Indonesia: encontraron restos humanos y las cajas negras de la aeronave
"Los laicos que tengan la edad y las aptitudes determinadas por decreto de la Conferencia Episcopal, pueden ser asumidos permanentemente, a través del rito litúrgico establecido, a los ministerios de lectores y de acólitos; sin embargo, esta concesión no les da derecho a mantener ni a remuneración de la Iglesia", dispuso el pontífice.
Así, el Papa eliminó la restricción de género y abrió la posibilidad de que las mujeres participen en los ministerios hasta hoy reservado a hombres.
"La elección de conferir también a las mujeres estos cargos, que implican una estabilidad, un reconocimiento público y el mandato del obispo, hace más eficaz en la Iglesia la participación de todos en la obra de evangelización", justificó Francisco su decisión.