Diez problemas sexuales que necesitan ayuda de un profesional y no lo sabías
Toda persona tiene en claro que cuando padece de falta de libido debe acudir a un especialista en el tema, es decir, un sexólogo. Pero lo cierto es que hay otros problemas más cotidianos, que por ahí los naturalizamos y creemos que no necesitan de ayuda.
Nuevo beneficio desbloqueado: además de ser bueno para el estrés, el sexo previene la gripe
Tanto hombres como mujeres y de cualquier edad pueden sufrir en algún momento de su vida algún tipo de problema o disfunción sexual que les haga plantearse ir a la consulta de un sexólogo. Cabe destacar que en algunas ocasiones, estos trastornos pueden causar dolores físicos, dificultad para llegar al orgasmo o para mantener la excitación sexual.
1. Vaginismo
Se trata de una dificultad física que no permite conseguir la penetración vaginal. Esto se produce por una contracción de los músculos que rodean la entrada de la vagina y que hace que se cierre la abertura de la misma. El miedo al dolor, la falta de información y la ansiedad que provoca ese momento hacen que sea imposible estar relajada al momento del coito y esto provoca mucho dolor.
2. Disfunción eréctil
La dificultad del hombre para lograr o mantener durante un periodo de tiempo la erección, problema que lleva a no tener relaciones sexuales satisfactorias y plenas. Esta condición genera un gran impacto en la vida personal de quien lo padece, debido a que afecta mucho su autoestima. La ansiedad suele ser una de las causas que lo provoca y puede hacer que el problema sea más importante en una especie de círculo vicioso al sentir frustración si no se logra la erección en varias ocasiones.
3. Falta de deseo sexual
Tener la libido baja es uno de los problemas más frecuentes en ambos sexos, aunque suele darse con más frecuencia en las mujeres. Según los expertos, tres de cada diez mujeres de entre 18 y 59 años han tenido algún tipo de dificultad para sentir deseo sexual en algún momento de su vida.
Orgasmos mientras dormimos: ¿cómo se dan estos misteriosos episodios sexuales?
Esta condición puede deberse a múltiples factores, como el estado de ánimo, el estrés, el agotamiento o un problema personal puntual. Aunque también pueden estar relacionados con problemas físicos como alguna enfermedad en la zona genital.
4. Eyaculación precoz
La persona con pene eyacula de manera prematura, sin desearlo de ese modo y puede suceder ante cualquier estimulación sexual que se dé antes, durante o después de la penetración. Los factores psicológicos suelen ser los más comunes y entre las consecuencias que puede provocar este trastorno encontramos ansiedad, nerviosismo, depresión y autoestima baja.
5. Anorgasmia
Es la ausencia o tardanza de llegar al orgasmo, pero cabe destacar que a esta condición pueden padecerla hombres y mujeres por igual. Aquí entran en juego varios factores psicológicos como la falta de autoestima, miedo al fracaso, etc. Así como también problemas en la relación: falta de comunicación, conflictos no resueltos, son los que generalmente reinan a la hora de buscar una explicación para el problema.
6. Fobias
Hay algunos miedos difíciles de encontrar, pero que existen, como el miedo al semen, el miedo al pene, al coito, etc. Esas fobias no tratadas pueden llevarnos a una aversión a la actividad sexual de cualquier tipo. Lo bueno es que un sexólogo suele contar con la formación específica para ayudarnos a romper tabúes y acabar con ellos.
7. Problemas de pareja
Un sexólogo también puede ayudarte en momentos en los que la comunicación no sea tan fluida en la relación amorosa. Muchas veces puede hacer entender falsos mitos sobre las relaciones sexuales y explicaros dónde reside ese punto de fricción que por vosotros mismos quizá no seáis capaces de resolver.
Miedo al pene: ¿cuáles son las causas, síntomas y tratamiento de la falofobia?
8. Dispareunia
Se trata de un trastorno poco frecuente que afecta aproximadamente a un 12 por ciento de las mujeres (aunque puede afectar a los hombres también). Se trata de un dolor persistente en la zona pélvica durante o después de la penetración o la eyaculación, lo que suele estar asociado al vaginismo. Puede ser consecuencia de la sequedad vaginal o de trastornos en los órganos genitales.
9. Rechazo sexual
Otro trastorno que tiene origen en las causas psicológicas, como el miedo o la ansiedad, para desencadenar este problema. Se trata de un trastorno caracterizado por un rechazo al sexo en la que se evita de todas las maneras posibles cualquier tipo de actividad sexual.
10. Trastorno en la excitación sexual en la mujer
Esto hace que no se den cambios fisiológicos habituales durante el momento de la excitación, como la lubricación, la aceleración del corazón o la tensión muscular. Es un problema similar a la disfunción en el caso de los hombres pero en las mujeres. La angustia ante una relación sexual fallida suele ser uno de los motivos más importantes.