Los puntos más oscuros que tiene la gestión de Claudio Tapia en la AFA

La presidencia de Claudio "Chiqui" Tapia en la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) sigue estando marcada por una serie de decisiones controvertidas que generaron críticas en diversos sectores del deporte. La Inspección General de Justicia (IGJ) ordenó recientemente la anulación de la asamblea en la que Tapia iba a ser reelecto como presidente, lo que reavivó el debate sobre su gestión.

Qué dice la letra chica del histórico fallo de la IGJ contra el Chiqui Tapia

Durante los años bajo su mandato, el fútbol argentino ha visto cambios significativos, muchos de los cuales han sido cuestionados por su falta de transparencia y consecuencias negativas para las competiciones, tal cual lo archivó el periodista Jonatan Kolibski en su cuenta de X. 

  - Once años sin visitantes regularizados en Primera División: La ausencia de hinchas visitantes en los estadios de la máxima categoría se prolonga por más de una década, generando un clima de desazón en los hinchas amantes del "color" de las tribunas. Pese a algunos amagues en competencias federales y definiciones de copas, los visitantes nunca volvieron en totalidad, sino que lo hicieron como "neutrales". 

- Diecisiete años sin visitantes en el Ascenso: Esta misma medida se extiende a las divisiones inferiores, pero con más años. 

- Diez años con 30 equipos en Primera División: La cantidad excesiva de equipos en la primera categoría siempre fue uno de los puntos más criticados de la gestión Tapia por la desorganización que provoca en el torneo. 

- Más de 40 equipos en la Primera Nacional: Este número abultado en la segunda división saturó la liga y complica año tras año la competitividad del torneo.

- Una Primera B desdibujada: La calidad de la división del Ascenso cayó tanto que hoy se asemeja a la Primera C, en una evidente degradación del nivel.

- Fusión entre la Primera C y D: La decisión de fusionar las categorías más bajas generó desconcierto entre los futboleros y clubes, siendo vista como una maniobra insólita y perjudicial.

- La inexplicable nueva divisional: La creación de una liga que parece favorecer a ciertos grupos ligados a gremios y sectores de influencia económica levantó miradas sospechosas sobre su verdadera finalidad.

- Contradicciones con las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD): Aunque Tapia y su equipo pregonan defender los clubes sociales, algunos cercanos a los pasillos de la AFA remarcan que en realidad siempre fomentaron la instalación de las SAD, un modelo que algunos consideran incompatible con la esencia del fútbol argentino.

- Manipulación de ascensos y descensos: Se inventaron ascensos repentinos y eliminado descensos de la noche a la mañana. 

Uno de los casos más destacados es el de Sportivo Italiano, que, pese a terminar sexto en la Primera C, ascendió gracias a una serie de resultados ajenos. En un extraño repechaje, San Miguel (de la Primera B) venció a Douglas Haig (del Federal A) en una tanda de penales, lo que benefició a Italiano con un ascenso.

Otro hecho llamativo es la evolución meteórica del Deportivo Riestra, un club que hace 10 años militaba en la quinta división y hoy tiene peso en las decisiones que involucran a los "grandes" de la Liga Profesional, a pesar de no contar con socios.

Tras el fallo de la IGJ, Chiqui Tapia, hizo un posteo junto a Messi y De Paul

Por último, está el particular caso del Club Camioneros que generó una importante preocupación: la institución no solo tiene un equipo en el Federal A, sino que también logró un ascenso en la Primera C, lo que plantea la posibilidad de que, en el futuro, pueda tener dos equipos en la misma categoría.

La gestión de Tapia, cargada de decisiones polémicas y situaciones de poder concentrado, enfrenta ahora una crisis de legitimidad con la intervención de la IGJ, que pone en jaque su reelección. 

El futuro del fútbol argentino queda en un punto crítico, con la mirada puesta en las próximas resoluciones judiciales y la respuesta de los clubes y dirigentes involucrados.