Declaró Gil Pereg: aseguró que su madre "le habla en la cabeza" y llamó a sus gatos "hijos"
Este martes, declaró por primera vez Nicolás Gil Pereg frente al jurado popular que definirá su suerte. Aseguró entre otras cosas que su madre "le habla en la cabeza", le dice que está secuestrada y le pide que "vaya a salvarla". "Es mentira que están muertas, jamás vi un cuerpo", dijo.
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Además expresó que lo culpan del doble crimen solo porque "vive de forma rara" y que fue la fiscalía y la policía los que ocultaron los cuerpos de su madre y su tía en su casa de Guaymallén.
"Me culpan porque vivo de forma rara, precaria, de forma no común como la de ustedes", dijo el acusado ante el jurado popular.
Además insistió en mostrarse como un antisocial y un "raro", ya que detalló que "no puede vivir en este mundo porque no puede tener relaciones con nadie" y que las únicas personas que han estado a su lado han sido su madre y su abuelo.
"Es mi vida. Jamás podría vivir sin madre. Yo vivía gracias a ella. Ella me enviaba dinero para poder sobrevivir. No tengo cómo vivir sin ella", agregó.
Dijo que sus gatos son sus hijos
El israelí llamó a sus gatos "hijos" y aclaró: "Por un tiempo límite puedo ser como una criatura de dos patas y ser como los humanos, pero en mi casa vivía como gato en un 100%".
Su vida en Israel
Consultado por su abogado, explicó: "yo fui al ejército y vi todo lo malo que hacen. Fui al psiquiatra del ejército para salir de ahí. Me tuvieron internado cuatro días y luego me soltaban, me hacía mal".
"Con la ayuda de mi mamá decidí escapar de Israel. Ella me iba a mandar plata para vivir en otro país. Fui a Chile poco, luego a Buenos Aires y me fui porque había mucho tráfico", continuó.
Finalmente, la declaración de Pereg fue interrumpida para dar lugar a un cuarto intermedio dispuesto por la jueza técnica que guía el juicio por jurados, Laura Guajardo.
