Miedo al pene: ¿cuáles son las causas, síntomas y tratamiento de la falofobia?
La falofobia o miedo al pene existe y se trata de una fobia como otra cualquiera, que requiere de tratamiento, aunque no es de las más comunes, pero de igual modo se engloba dentro del grupo de trastornos fóbicos específicos y refleja el terror que algunas personas pueden sentir de manera irracional al ver o tocar un miembro genital masculino.
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Este trastorno forma parte de las fobias sexuales o también llamadas erotofobias, en las que hay otros miedos que tienen que ver con los momentos de intimidad y el sexo, ya sea oral o penetración.
Algunas las fobias sexuales más comunes son la coitofobia, el miedo a las relaciones sexuales; gimnofobia, terror a la desnudez; erotofobia, miedo a hablar de sexo; la itifalofobia, miedo a tener una erección o la hafefobia, miedo al contacto o a ser tocado por otra persona.
Cabe destacar que tanto hombres como mujeres pueden sufrir falofobia o cualquiera de estos trastornos que provoca en muchas ocasiones que se evite poder tener sexo, porque requiere enfrentarse al estímulo fóbico que lo provoca.
Las fobias son trastorno de ansiedad para la psicología y en el caso puntual de la falofobia, ese miedo al órgano sexual masculino se produce frente a un pene cualquiera sea su estado, es decir, flácido o erecto, y provoca situaciones de malestar, entre ellas estrés y ansiedad en quien lo padece. Aunque ese temor puede aparecer no solo al ver un pene, sino también cuando alguien habla del tema o con una simple imagen.
Tiene solución la falofobia
La falofobia puede provocar que se eviten relaciones sexuales de cualquier tipo al punto de no tener contacto con otra persona. Lo positivo en todo esto, es que es fácil identificar esta fobia, ya que los síntomas son los comunes de cualquier tipo de fobia: hay ansiedad.
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Muchas personas sienten vergüenza de contar que le tienen miedo al pene y eligen callarse y si no se habla con un especialista puede llevar a problemas mayores.
Es importante saber que si sentimos ansiedad o malestar ante una conversación en la que se hable del órgano genitlal masculino, si nos hace sentir mal o nos estresa ver una imagen de un pene o no toleramos ver uno, lo mejor es ir a un experto en Psicología o Sexología que será quien sepa cómo ayudar a superar el problema antes de que se haga más complicado y provoque mayores consecuencias en nuestra salud mental.
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Es muy importante saber cuáles son los síntomas físicos que nos indican que estamos ante un problema: la hiperventilación, falta de aire, exceso de sudoración e incluso taquicardias al estar ante el miembro viril de un hombre, temblores, dolor de estómago, sensación de mareo o dolor de cabeza y, en estados más angustiosos también se puede sentir opresión en el pecho y sequedad en la boca.