A dos semanas de las elecciones, siguen las visitas nacionales
Es que hasta ahora lo que reina en la ciudadanía es la desinformación y temen que haya poca participación el 14 de agosto.
El viernes pasado el Partido Justicialista tuvo su día de gloria. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner no pudo dar señales de apoyo a los candidatos locales, pero en su lugar estuvo su compañero de fórmula, Amado Boudou.
El Ministro de Economía estuvo en una escuela, se reunió con empresarios y tuvo su propio acto militante en el Teatro Independencia. En cada escenario buscó mostrarse como un candidato “fresco” y por eso hasta tocó la guitarra junto al líder de la banda La Mancha de Rolando. Los candidatos locales lograron la foto junto a él, pero de parte de Cristina, por ahora, sólo tienen la promesa de que vendría en septiembre, luego de las primarias.
En el radicalismo aún mantienen algunas dudas sobre la estrategia. En realidad la apuesta más importante de cara a octubre es “provincializar” la elección para que lo que se ponga en evaluación sea la gestión de Celso Jaque y no la de Cristina.
El otro desafío que tienen es cómo remontar la imagen de Ricardo Alfonsín, que apenas supera el 10% de intención de voto en Mendoza. El candidato a presidente ya vino a Mendoza y volvería a pasar por la provincia en los próximos días para acompañar a los candidatos locales. Pero por detrás, en la UCR aún analizan pegar la lista a otros candidatos a presidente, todo después de octubre.
En el PJ disidente el que puso un pie en la provincia fue Alberto Rodríguez Saá, que estuvo el sábado. El candidato, que tiene el apoyo del PD, tiene buena performance en la provincia y apuesta a pelear más arriba que a nivel nacional. En la otra pata del PJ disidente aún negocian la llegada de Eduardo Duhalde a Mendoza. Por lo pronto, vendría el candidato a vicepresidente, Mario Das Neves.
Ya pasaron por la provincia varios de los referentes de la izquierda, como Alcira Argumedo, candidata a presidenta por Proyecto Sur. La gran apuesta es llegar al piso de votos exigido por la nueva ley para poder competir en octubre.
El viernes pasado el Partido Justicialista tuvo su día de gloria. La presidenta Cristina Fernández de Kirchner no pudo dar señales de apoyo a los candidatos locales, pero en su lugar estuvo su compañero de fórmula, Amado Boudou.
El Ministro de Economía estuvo en una escuela, se reunió con empresarios y tuvo su propio acto militante en el Teatro Independencia. En cada escenario buscó mostrarse como un candidato “fresco” y por eso hasta tocó la guitarra junto al líder de la banda La Mancha de Rolando. Los candidatos locales lograron la foto junto a él, pero de parte de Cristina, por ahora, sólo tienen la promesa de que vendría en septiembre, luego de las primarias.
En el radicalismo aún mantienen algunas dudas sobre la estrategia. En realidad la apuesta más importante de cara a octubre es “provincializar” la elección para que lo que se ponga en evaluación sea la gestión de Celso Jaque y no la de Cristina.
El otro desafío que tienen es cómo remontar la imagen de Ricardo Alfonsín, que apenas supera el 10% de intención de voto en Mendoza. El candidato a presidente ya vino a Mendoza y volvería a pasar por la provincia en los próximos días para acompañar a los candidatos locales. Pero por detrás, en la UCR aún analizan pegar la lista a otros candidatos a presidente, todo después de octubre.
En el PJ disidente el que puso un pie en la provincia fue Alberto Rodríguez Saá, que estuvo el sábado. El candidato, que tiene el apoyo del PD, tiene buena performance en la provincia y apuesta a pelear más arriba que a nivel nacional. En la otra pata del PJ disidente aún negocian la llegada de Eduardo Duhalde a Mendoza. Por lo pronto, vendría el candidato a vicepresidente, Mario Das Neves.
Ya pasaron por la provincia varios de los referentes de la izquierda, como Alcira Argumedo, candidata a presidenta por Proyecto Sur. La gran apuesta es llegar al piso de votos exigido por la nueva ley para poder competir en octubre.