Gabriel Canci, angustiado por la crisis: "Los créditos que promocionan son una mentira"
La crisis económica que trajo el coronavirus golpea masivamente a todos los empresarios y no discrimina entre chicos, mediano y grandes. La situación que viven muchos de ellos es realmente angustiante y los que pueden buscan reinventarse para poder sobrevivir a la faltad e actividad que genera la pandemia.
Uno de ellos es el conocido Gabriel Canci, sinónimo de moda y espectáculos en Mendoza, que por estos días se dedica a fabricar tapabocas para no quedarse sin ingresos. Reconoce que la incertidumbre que siente es muy grande pero busca oportunidades para que sus negocios no tengan que cerrarse definitivamente. Su local de ropa tiene las persianas bajas, la producción de su espumante Let me in my Queen está parada y el desastre se desató el fin de semana de la "Vendmia para todos" que la pudo hacer pero sin público.
"Estamos con un desasosiego, con una incertidumbre terrible a la que se le suma el estado real de la crisis. Nadie sabe cuándo vamos a salir", cuenta en una charla con Vox Populi y detalla la reconversión de su negocio La Hermandad que ahora produce barbijos a grandes escalas para aquellos sectores que si están abiertos y los promociona a través de su Instagram y los vende en la web. Él pudo encontrar esa veta pero pide por sus amigos y por otros empresarios que no pueden hacer nada más que esperar que todo pase y de que a poco puedan abrir.
"Rápidamente, pero con cautela, es necesario que se comiencen a abrir los negocios. No puede ser, por ejemplo, que una peluquería esté cerrada. Se puede implementar un procotolo. La gente no puede pagar sueldos, ni alquileres, ni impuestos", sostuvo y pidió a los gobernantes medidas para poder salir y también algún ejemplo de su parte en solidaridad con los que están haciendo un gran esfuerzo. No solo lo dice por los dueños de negocios si no también por los médicos y todo el personal de salud.
"Hay que priorizar a aquellos que laburan en salud, a las fuerzas de seguridad. Debemos ponernos en lugar del otro y si los que están en ligares de poder, de tomas de decisión no se ponen en el lugar de los que están más abajo no vamos a salir mas", sentenció.
Pidió por acciones más que palabras y ejemplificó: "Los monotributistas, las pymes, están muy mal. Los créditos que promocionan son una mentira. Vas al banco y te piden mil papeles o buscan excusas, porque lo que no quieren es darte el préstamos".
Pero más allá de todo lo negativo de la pandemia y sus efectos, busca verle el lado positivo a la situación. "Nadie tiene la culpa, no nos queda otra más que esperar. Es algo que no podemos manejar, no te podés enojar. Hay que pedrile a Dios o a lo que vos creas, a la energía magnánima que maneja todo, que esto pase rápido. Hay que relajarse, meditar y orar. Puede ser en el orden que quieras. Sirve mucho", cuenta y relata que en sus tiempos libres aprovecha para cocinar y mirar a su círculo.
"No puedo compartir con ellos pero cada vez que puedo les llevo a mis papás o algún amigo alguna rica comida que preparé o un regalo", conclye.