A las risas en la cárcel: bronca por la reacción del exdiputado liberatrio acusado de pedófilo
El exdiputado misionero Germán Kiczka y su hermano, Sebastián, acusados de pedofilia, recibieron la visita de familiares y amigos en la cárcel de Apóstoles, Misiones. Ambos se mostraron tranquilos y de buen ánimo, a pesar de las graves acusaciones que enfrentan.
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Luego de haberse negado a declarar ante el juez Miguel Ángel Faria, del Juzgado Penal N°4 de Apóstoles, el exlegislador libertario fue visitado por sus familiares. Al salir al patio, Kiczka lucía sonriente. Recibió a su amigo con un abrazo y saludó con un beso a su padre y a su tía.
Durante los 15 minutos que duró la visita, se mostró animado, charlando de manera distendida y, en varios momentos, riendo a carcajadas. Al despedirse, estrechó la mano del hombre que los acompañaba, besó la mano de una mujer y saludó nuevamente a su padre y a su tía con un beso en la mejilla.
Tras la salida de Germán, fue el turno de su hermano Sebastián, quien, al igual que el exdiputado, recibió la visita de su tía y su padre. Sebastián también se mostró relajado y sonriente durante toda la conversación.
Para despedirse, el gesto fue similar al de la llegada: besos en la mejilla y la mano. Ambos compartieron un momento con sus familiares, quienes llevaron mate para amenizar el encuentro.
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Sebastián Kiczka fue detenido el jueves 29 de agosto por la noche y, al igual que su hermano, enfrenta cargos por tenencia y distribución de material de explotación sexual infantil. Ambos optaron por no declarar ante el juez encargado de la causa.
En un principio, Germán Kiczka intentó desvincularse de la situación de su hermano, pero finalmente ambos son defendidos por el abogado Gonzalo de Paula. Este asumió la representación legal de los dos bajo la condición de que se pusieran a disposición de la Justicia, a cambio de ser internados en un centro de rehabilitación.
A pesar de la gravedad de las acusaciones, los hermanos han mantenido una actitud relajada durante su tiempo en prisión, reflejada en las breves visitas que han recibido de sus seres queridos.