Violencia, secretos e infidelidades: Fabiola Yañez rompió el silencio tras la denuncia contra Alberto Fernández
La ex primera dama Fabiola Yáñez se animó a hablar después de la denuncia contra Alberto Fernández por violencia de género y en una entrevista intima con el medio Infobae, desde Madrid aseguró que el ex presidente la "amenazó" durante "dos meses" con que "se iba a suicidar". Además, contó detalles de diversas situaciones de extrema violencia e infidelidades.
La última súplica de Alberto Fernández antes de quedar incomunicado
"Esta persona (Alberto Fernández) estuvo durante dos meses - están todos los chats y hay muchas personas que lo saben- amenazándome día por medio con que, si yo hacía esto o lo otro, se iba a suicidar. Eso no se hace, eso es un delito", afirmó Yáñez durante la entrevista.
En esa misma línea, la ex pareja de Fernández aseguró: "He cuidado a este hombre de tantas cosas que él ha hecho, que esos videos que aparecieron el otro día son poca cosa al lado de lo que hizo".
Durante el reportaje difundido este sábado, Yáñez contó también que está pasando un momento que "nunca" imaginó por algo que se dio a conocer a raíz de la causa judicial contra el ex presidente por presunto tráfico de influencias en la contratación de seguros en su gestión.
"Nunca hubiese hecho una cosa como ésta porque jamás hubiese querido exponer a mi hijo o que mi hijo tenga que ver algo de esto algún día en su vida", expresó Fabiola.
La ex primera dama reveló también que, mientras ocupó su rol al lado del ex presidente, no la "dejaban hablar" y que en los medios de comunicación "cualquiera dijo lo que quiso" de su persona, en referencia a que se dijeron muchas especulaciones sobre ella, sin saber lo que estaba viviendo.
El detalle que delató dónde y cuándo fueron las agresiones de Alberto Fernández a Fabiola Yañez
"Jamás nadie salió a defenderme, nadie me defendió. Lo único que yo recibía como respuesta de la persona encargada de la prensa presidencial era: 'No les contestes porque de esa manera les das entidad'", continuó Yañez. En este sentido, afirmó que el ex mandatario le decía tenía que hacer "lo que esta persona encargada de esa área decía" y que debía quedarse "callada".
Luego explicó que "siempre estuvo sola en Olivos" y que el peor momento que vivió fue "el último año", cuando tuvo que ir a vivir a la casa de huéspedes de la quinta presidencial debido a las continuas violencias de todo tipo.
"Tuve que salir en pantuflas y bata e irme a la casa de huéspedes", enfatizó. Yañez se refirió también al Ministerio de Mujeres y afirmó que le pidió "ayuda" a la cartera ante la situación que se encontraba atravesando.
"Salieron ahora a defenderse cuando no me defendieron a mí, mientras me defenestraban. Decían barbaridades de mí", recordó sobre los funcionarios del Ministerio de Mujeres.
Por otra parte, respecto a los polémicos videos de Alberto Fernández junto a Tamara Pettinato, sostuvo que no era el único que encontró en el celular del ex mandatario y que "había otras fotos y había otras personas".
"Ocurría todo el tiempo. El trabajo psicológico que habían hecho conmigo había normalizado esas situaciones", dijo Yáñez sobre las infidelidades del ex presidente.
Las declaraciones de la ex primera dama se dieron luego de que denunció al ex presidente por "violencia física" y "terrorismo psicológico", según la presentación que hizo ante la Justicia.
La Justicia allanó la casa de Alberto Fernández y secuestró su teléfono
La denuncia fue realizada a través de la plataforma zoom ante el juzgado del magistrado federal Julián Ercolini, luego de que se conocieran chats y fotos que estaban en el celular de la secretaria de Fernández en la investigación por la causa de los seguros.
En su declaración, también se refirió a mensajes telefónicos por parte del ex presidente que tenían el objetivo de amedrentarla, lo que la llevó a cortar el diálogo con Fernández.
Cuando realizó la presentación ante el juez, la ex primera dama aclaró además que su comunicación con el ex mandatario actualmente se mantiene a través de su madre, a los fines de no romper el vínculo con el hijo que comparten.