Sorpresa en Chubut por el nacimiento de un ternero de dos cabezas

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Estas malformaciones congénitas se consideran una teratología, lo que significa que son anomalías en el desarrollo embrionario del animal y no se deben a la consanguinidad (cruce entre parientes cercanos) como causa.

En este caso particular, los veterinarios de la zona explicaron que la deformación en el ternero fue provocada por la genotoxicidad, que implica daños al material genético del animal a través de diferentes vías, como la exposición a factores físicos, químicos o biológicos.

Aunque el ternero con dos cabezas falleció, su madre sobrevivió al momento del nacimiento. Sin embargo, los especialistas advierten que, en situaciones similares, suele pasar algún tiempo hasta que la madre también muere.

Estas malformaciones congénitas suelen ser resultado de una serie de factores genéticos y ambientales. En muchos casos, los animales afectados enfrentan una vida breve y con complicaciones debido a las anomalías en su desarrollo.

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Este tipo de eventos son raros y a menudo generan sorpresa y atención por parte de la comunidad local, pero son fenómenos naturales que pueden ocurrir en la reproducción de animales.

Los especialistas en veterinaria y genética animal investigan estos casos para comprender mejor sus causas y ayudar a prevenirlos en la medida de lo posible.