El momento en el que Chano dio la mejor noticia de todas: qué pasará con Tan Biónica
La presencia de Santiago Chano Moreno Charpentier en el escenario Flow de Lollapalooza 2023 no era una duda para él, pero sí lo era para todos los demás. Él sabía que iba a reunir a la banda de su vida, pero solo unos pocos estaban al tanto de este secreto. Aunque el rumor se había propagado por todo el Hipódromo de San Isidro, la mayoría de la gente no quería ilusionarse demasiado.
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Sin embargo, Chano no les falló a sus fanáticos y les brindó un espectáculo inolvidable, mezclando canciones de Tan Biónica con las mejores de su repertorio en solitario. A las 20 horas, el cantante subió al escenario y comenzó a calentar el ambiente con "Oración al sol". Después de un bloque electrofolk, que incluyó "Carnavalintro" y "Naistumichu", las luces se apagaron, pero las emociones siguieron en alto.
El momento de intimidad llegó con "Claramente", mientras Chano tocaba su guitarra criolla y sus fanáticos coreaban sin cesar. Para finalizar, el cantante anunció que Tan Biónica volvería al escenario para regalarles una última noche mágica en un estadio de Buenos Aires.
El rumor que había circulado previamente se confirmó y la multitud enloqueció. Las pantallas comenzaron a mostrar momentos de la banda, musicalizados con remixes de algunos de sus clásicos, mientras el clima de rave biónica inundaba el lugar. Las sirenas sonaron y los cuatro biónicos volvieron a reunirse, trajeados como de costumbre. Con Diego Lichtenstein en la batería, Bambi Moreno Charpentier en el bajo y Seby Seoane en la guitarra, Chano pidió "el pogo más grande de Lollapalooza" y la multitud respondió.
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"La melodía de Dios" fue otro de los clásicos del grupo que sonó en el escenario. El final fue pura emoción, con Chano abrazándose a su hermano y anunciando un concierto de despedida en Buenos Aires. "Ese que nos debíamos", se justificó, aunque nadie se lo había pedido.
"All you need is love" sonó de fondo mientras Chano repartía besos y corazones, y recibía el amor incondicional de su público. La sonrisa de su mamá Marina entre el público y las lágrimas de su hermano Bambi a su lado coronaron el momento. Fue un encuentro familiar y musical, con miles de almas como testigos.