La carta que publicaron los vecinos del kiosquero acusado del crimen de Palombarini
Este miércoles vecinos y amigos de Gerardo Godoy (37) publicaron una carta para "defender" al kiosquero acusado de matar a balazos a Esteban Palombarini (38) el pasado sábado en el Minimarket 'La Esquina', en Perú y Vendimiadores de Ciudad.
El escrito fue difundido con la intención de "verbalizar su postura y contar la clase de persona que es (Godoy)"; y a su vez "dar a conocer su opinión sobre lo ocurrido".
Sin mencionar a la víctima, en el texto se destaca a Godoy como "una persona trabajadora" y como un "guerrero de la vida" por el accidente que sufrió años atrás y que lo dejó con una discapacidad en uno de sus brazos.
Caso Palombarini: el acusado del crimen fue trasladado a la cárcel
"Gera es una persona trabajadora, con un corazón muy noble, que cuando tuvo un accidente muy grande que case le cuesta la vida, quedando con discapacidades, se levantó y salió adelante un verdadero. Un guerrero de la vida", dice una parte de la carta.
Y luego agrega: "Pedimos ser escuchados porque todo lo que se dice difamando a Gerardo es solo una parte de los hechos. Esta persona que mencionamos también tiene el mismo derecho de ser defendido ante sus seres queridos".
Mientras tanto, Godoy se encuentra alojado en la cárcel de Boulogne Sur Mer imputado por el delito de "homicidio agravado por el uso de arma de fuego". El sospechoso arriesga una pena de más de 30 años de prisión.
El hecho
El crimen de Esteban Palombarini, conocido como "Plancha", ocurrió el sábado 25 de junio en horas de la tarde en el Minimarket 'La Esquina', ubicado en la intersección de las calles Perú y Vendimiadores, de Ciudad.
Tras una discusión con Gerardo Godoy, empleado del kiosco, la víctima recibió tres impactos de bala y cayó a los pocos metros del negocio, en donde finalmente murió.
En un primer momento, Godoy dijo que se defendió de un intento de asalto y acusó al "Plancha" de ser el delincuente. Pero esta versión luego fue descartada por los detectives y se procedió a la detención del sospechoso.
Palombarini vivía en la calle Juan Agustín Maza, a la vuelta del kiosco, y era conocido en el Club General San Martín, en donde años atrás había jugado al básquet. El hombre estaba separado, tenía una hija de 12 años y se encontraba desempleado.