El durísimo relato de La Chepi al hablar sobre sus adicciones: "Al igual que mi papá, sufrí alcoholismo"
Dani La Chepi conmovió al revelar lo difícil que fue para ella superar una difícil etapa de su vida, en la que tuvo que luchar contra el alcoholismo. Es que la influencer siempre se muestra muy alegre, tanto en sus videos de Instagram, como lo que demostró ser en MasterChef Celebrity, donde se posicionó como una de las participantes más queridas.
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En esta oportunidad abrió su corazón en una entrevista exclusiva y mostró un lado inédito. Con un difícil pasado, se animó a compartir sus experiencias de vida y la enseñanza que sacó de cada una de ellas.
Sin tapujos, la comediante comenzó hablando de sus adicciones y explicó la lucha constante que tiene con el cigarillo: "Ahora, al día de hoy, van 11 días que no fumo pero para mí es como un año y medio. Siento que es un montón de tiempo. Cada día es un día más. El cigarrillo es una de las peores drogas que hay porque es legal, lo podés comprar en cualquier kiosco y puede comprarlo cualquier persona. De hecho, yo empecé a fumar a los 13 años".
"Fumé, fumé y fumé hasta que quedé embarazada de Isa. El día que supe que estaba embarazada, no fumé ni tomé más alcohol. Te voy a contar algo que nunca conté: estuve mucho tiempo medicada por alcoholismo. Al igual que mi papá, sufrí el alcoholismo", agregó en diálogo con Pronto.
Y continuó: "Recuerdo que volví a Buenos Aires, estaba mirando la película V de venganza con un vino tinto a las 2 y media de la tarde, agarré la máquina de cortar pelo, me arranqué las extensiones, me corté con la tijera y me rapé".
"Me fui a tatuar a un subsuelo de Martínez. No me gustaban los tatuajes pero me hice un micrófono y un laurel en la muñeca. A la noche me fui a cantar con la orquesta Buenos Aires Broadway a un bar mitzvá, llegué con una capucha y cuando me la quité, mi jefe me quería matar", continuó.
En la entrevista también aseguró que ese fue su peor momento: "Sin dudas. Estaba en un momento muy oscuro y al igual que mi padre, ahogaba mis penas en lo errado: pucho y alcohol. Más de eso no pasé pero era mucho alcohol todo el tiempo. Un día mi psicóloga me dijo 'bueno, Dani, hasta acá llegamos y necesito que empieces el psiquiatra para hacer un tratamiento de verdad'. Eso sumado a la terapia, que nunca la dejé".
Preocupada por su salud y con ganas de salir adelante, la influencer comenzó un tratamiento con medicación y terapia: "Me llevó muchos años de medicación. Me costó mucho y me dieron con remedios de todo tipo. De un día para el otro dejé el alcohol y empecé a ayudar a quienes estaban peor que yo".